Barrettes

Durante la vinificación, los Barrettes aportan un volumen y una redondez a la bebida, minimizan la cantidad de las notas herbáceas y vegetales, así como ayudan a estabilizar el color. Durante la crianza dan la complejidad, aportan rápidamente al vino unas notas de roble, imitando una armoniosa crianza en barrica a corto plazo. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Durante la crianza, los Barrettes aportan al coñac un aroma a roble. En función del tipo de tostado, revelan desde las notas ligeras de vainilla, frutas secas hasta las intensas notas ahumadas, suavizando y redondeando el sabor de la bebida e imitando una crianza equilibrada en barrica. El color del coñac se cambia de oro claro a ámbar. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Durante la crianza, los Barrettes aportan al brandy un aroma a roble. En función del tipo de tostado, revelan desde las notas ligeras de vainilla, frutas secas hasta las intensas notas ahumadas, suavizando y redondeando el sabor de la bebida e imitando una crianza equilibrada en barrica. El color del brandy se cambia de oro claro a ámbar. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Durante la crianza, los Barrettes aportan al whisky un aroma a roble. En función del tipo de tostado, revelan desde las notas ligeras de vainilla, frutas secas hasta las intensas notas ahumadas, suavizando y redondeando el sabor de la bebida e imitando una crianza equilibrada en barrica. Al sumergir los Barrettes por un período breve en jerez, brandy u otra bebida, estos enriquecen de una manera integra el sabor y el aroma del whisky. El color del whisky se cambia de oro claro a ámbar. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Para las variedades «Reposado», hasta los 6 meses de crianza. Los Barrettes reducen las notas agridulces y revelan el dulzor natural del agave. Aportan unas notas de roble, vainilla y almendra, ennobleciendo el sabor. Dan un cálido matiz ambarino. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Suavizan fuertes notas herbáceas. Revelan las notas de cítricos, almendras y otros ingredientes, en función de la receta, que quedan en segundo plano frente a las notas dominantes del enebro. Aportan un aroma y un color de roble, así como convierten el sabor de la ginebra en más voluminoso. El color de la ginebra también se cambia en función del tipo de tostado elegido. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Al realizar la crianza con los Barrettes, el ron se convierte en más armonioso, suave y equilibrado. Gracias al intercambio con la madera tostada, en su bouquet aparecen unas notas de frutas, nueces, caramelo, miel, así como unos matices de especies y cítricos. El color se cambia de oro a ámbar oscuro, en función del plazo de la crianza y el tipo de tostado de la madera. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

La crianza con los Barrettes suaviza y redondea el destilado, así como convierte su bouquet en más intenso. Al realizar previamente la crianza de distintas bebidas con los Barrettes, se puede experimentar y obtener destilados originales, con un rico sabor y aroma. El color del destilado se cambia de oro a ámbar oscuro, en función del plazo de la crianza y el tipo de tostado de la madera. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario.

Los Barrettes desarrollan un potencial aromático de la cerveza, dándole más volumen y redondez, así como ennobleciendo su sabor. La cerveza se convierte en más corpulenta. Son ideales para las variedades fuertes. Al realizar previamente la crianza de distintas bebidas con los Barrettes, se puede experimentar y obtener unas recetas originales de la cerveza, con un rico sabor y aroma. Se aprovechan en la etapa de la crianza en los recipientes aptos para uso alimentario.

Durante el proceso de la crianza de la cidra con los Barrettes, se produce la precipitación de los compuestos fenólicos a través de oxidación, gracias a lo que el sabor de la sidra se convierte en más suave, perdiendo unas notas ásperas y amargas de los taninos gruesos. La sidra adquiere un aroma a vino sin pérdida del sabor de la fruta principal. Al sumergir los Barrettes por un período breve en calvados o en otro destilado, estos ennoblecen de una manera integra el sabor y el aroma de la sidra. Son universales para la crianza en cualquier tipo de los recipientes de material inerte, aptos para uso alimentario, sin riesgo de contaminación y sobreoxidación.